Buscar en Bauchavisuales

Sábado, día de doble sacrificio

Les habíamos avisado que este sábado 31 de enero íbamos a estar en la playa Bellavista de nuestra ciudad de Tomé a las 16 hrs., la verdad, hicimos lo posible, pero por algún extraño designio de Dios terminamos a las 21 hrs en la plaza de armas con el doble de público y mucho mejor ánimo, como que las cosas sí pasan por algo.


Imagen del proceso de armado en playa Bellavista, alrededor de las 10 am.


Comenzamos el día muy temprano, ya a las 8:30 de la mañana llegaban los primeros fieles a cargar nuestro camión con el escenario, cerca de las 9 ya partíamos a la playa con todo lo necesario para comenzar el trabajo.

Nos posicionamos y armamos toda la estructura necesaria en par de horas, luego los instrumentos y los detalles. Cerca de las 13 hrs. ya sólo nos faltaba realizar la prueba de sonido, pero algo andaba mal, no conseguíamos la energía suficiente para alimentar todos nuestros equipos.

Pasado las 12 pm ya teníamos todo armado y sólo faltaba la energía.


Hicimos todo lo posible, conversando con quien se ofreciera a solucionarnos el problema, pero pasaban los minutos y seguíamos sin energía. Finalmente llegó el momento de tomar una dura decisión, guardábamos todo y nos retirábamos a nuestras casas, o simplemente trasladábamos todo a un nuevo lugar y trabajábamos un poco más tarde.

Ahí fue cuando el ánimo del equipo sorprendió, la verdad, no recuerdo a nadie que dijera, guardemos todo y vamos a descansar, por el contrario, siempre la premisa fue, el trabajo se hace, sea acá o en otro lugar mejor.

Una vez comenzado el evento en la plaza de armas de Tomé

Nos trasladamos a la plaza de armas de la ciudad, en una hora volvimos a montar todo el escenario con instrumentos y todo, probamos sonido y esperamos relajadamente por un par de horas a que comenzara el evento, cuando llegó la hora de inicio comprendimos que Dios estaba con nosotros para apoyarnos y hacernos olvidar el cansancio.

Comprendimos también por qué habíamos llegado hasta allí y por qué nadie había querido partir a un merecido descanso, había mucha gente y lo mejor, estaba mucho más animada que otras veces, nos apoyaban con sus palmas al ritmo de la música, se alegraban con nosotros, pudimos predicar y hacer nuevos contactos, se sumaron nuevos grupos de apoyo al trabajo y todos terminamos contentos con la satisfacción del deber cumplido.



Sin duda fue lo que el Señor quiso desde un principio. A veces uno no entiende el por qué, y otras muchas veces, tampoco es necesario, lo único imprescindible es cumplir con la tarea de evangelizar y creo que hasta ahora lo estamos cumpliendo a costa de sacrificio que sabemos algún día será recompensado.

La próxima semana estaremos en la localidad de Cocholgüe, les esperamos...


Bendiciones...